Termina Otoño y muchos y muchas pensáis cuáles deberían ser los cuidados que necesitamos para cuidar nuestro cuerpo de manera sostenible. ¿Necesitamos unos cuidados concretos antes de la llegada del invierno? En el caso de la piel, podemos aplicar diferentes rutinas que nos ayudarán a cuidarla durante esta temporada tan fría. Así que vamos a daros nuestros consejos y recomendaciones para que cuidéis vuestra piel en invierno de manera sencilla. Aplicando esta rutina de manera diaria.
¿Perjudica el invierno a nuestra piel? La humedad y el frío cambian nuestros hábitos y tendemos a caer en costumbres que nos perjudican y nos provocan efectos negativos en la piel. ¿Cuáles son estos hábitos? ¿Cómo puedo prevenirlos? ¿Cuál es la manera correcta de cuidar mi piel en invierno? ¡Te lo contamos!
¿Qué debemos de saber?
Hemos de tener en cuenta los distintos hábitos que nos influyen a la hora de proteger nuestra piel del frío y la humedad del invierno.
Definitivamente, el invierno nos trae una serie de cambios que normalmente no tenemos en cuenta para nuestro cuidado personal. Solemos comer platos más calientes que fríos, siendo estos más perjudiciales para nuestro organismo, tendemos a movernos de lugares fríos a cálidos, y estos cambios repercuten un efecto negativo en nuestra piel…. y seguimos una serie de tendencias que nos perjudican en mayor o menor medida y, que normalmente, ignoramos.
La rutina que os vamos a introducir es efectiva para los distintos tipos de piel que poseemos. Así que presta atención.
Cuidados de la Piel en Invierno
Lo primero que debemos de tener en cuenta es que sea cual sea el tipo de piel que tenemos, debemos hidratarla. Aunque esto es un proceso que debemos seguir a lo largo de todas las temporadas del año, debemos de tener presente que en invierno, al existir tantos cambios de temperatura, es importante hidratar nuestra piel para evitar sequedad y cambios bruscos que afecten a su brillo y luminosidad natural.
Para hidratar nuestra piel, utilizaremos productos específicos para pieles grasas o pieles secas. Si nuestra piel es seca debemos de utilizar exfoliantes de piel para exfoliarnos adecuadamente, por lo menos, dos veces a la semana.
Para pieles grasas, es tan simple como entender que no es necesario aplicar más cantidad de producto. Con seguir con nuestro tratamiento habitual y exfoliar la piel de manera común, será suficiente para combatir los cambios bruscos en nuestra piel.
Dieta para cuidar la piel en invierno
Una parte fundamental de todo cuidado cosmético y natural, consiste en qué comemos, cómo lo comemos y cuando lo hacemos. Para ello, debemos de concienciarnos de que aunque invierno es una estación muy fría, no significa que debamos renunciar a platos fríos como la ensalada.
Muchos creemos que estos platos son refrescantes e ideales para el verano, pero lo cierto es que para aprender a cuidarnos correctamente, debemos de comer de todo en cualquier estación del año.
Una dieta sana en frutas y verduras nos ayudarán a equilibrar nuestros niveles de PH en la piel y a su vez, nos ayudarán a que el brillo y luminosidad de esta no decaiga. La Vitamina C ha de estar presente en nuestro día a día, sea mediante complementos alimenticios o consumiendo esta fruta y verdura que tanto nos ayudará.
Tips y recomendaciones finales:
- El estrés se ve reflejado en el tono de nuestra piel. Combatir el estrés será una parte fundamental para realzar su tono natural.
- En otoño vemos como nuestro pelo se cae y se renueva. Es importante que entendamos que esto es un proceso natural y que no ha de influir en el punto anterior y en nuestro día a día. Consulta nuestro post sobre la caída de pelo en otoño para saber más.