Oficialmente se ha terminado el otoño y por fin comienza el invierno. Muchos disfrutáis de unas deseadas vacaciones y descanso durante estas navidades junto a vuestra familia y otros estáis sometidos al estrés que provocan estas estaciones, la carga de trabajo y los cambios horarios… ¿Cómo puedo sobrevivir a este estrés provocado por el otoño? El estrés en otoño nos ha supuesto más de un quebradero de cabeza a algunos, así que vamos a prepararnos para el invierno y que todo salga lo mejor posible.
Si conseguimos centrarnos en nosotros mismos y adaptarnos a lo que nuestro cuerpo y salud necesita, conseguiremos que invierno sea el momento adecuado para afrontar el próximo año de la mejor manera posible.
¿Qué debemos de saber?
Hemos de tener en cuenta los distintos hábitos que nos influyen a la hora de proteger nuestra piel del frío y la humedad del invierno.
Definitivamente, el invierno nos trae una serie de cambios que normalmente no tenemos en cuenta para nuestro cuidado personal. Solemos comer platos más calientes que fríos, siendo estos más perjudiciales para nuestro organismo, tendemos a movernos de lugares fríos a cálidos, y estos cambios repercuten un efecto negativo en nuestra piel…. y seguimos una serie de tendencias que nos perjudican en mayor o menor medida y, que normalmente, ignoramos.
La rutina que os vamos a introducir es efectiva para los distintos tipos de piel que poseemos. Así que presta atención.
He sufrido de estrés en otoño, ¿Qué he hecho mal?
Lo más destacable, sin lugar a dudas, fue esa vuelta al trabajo y al cole que supuso el comienzo de otoño y el final de verano. Volver a la rutina siempre es algo que nos provca demasiado estrés y, la gente normalmente no suele llevarlo bien hasta pasadas las navidades, donde entramos en una estación fría y persistente hasta mediados de primavera. ¿No has sabido llevar bien tus horas de trabajo? ¿Sientes que no has aprovechado fuera de tu jornada laboral o escolar? Aprovechar esas horas extra en casa para tomarse un baño relajante, o pasar más tiempo con amigos y familiares cercanos, debería ser una tarea a realizar estas fiestas.
¿Qué más hemos dejado pasar por alto? El cambio de temperaturas y el horario nos han afectado en gran medida. Aún no sabemos si hará frío o calor que, de repente vemos 20 grados marcados durante el día. Esos cambios bruscos acompañados de menos horas de sol irritan perjudican a nuestra piel, cabello y, en mayor o menor medida a las horas de sueño que dedicamos.
Por último, los malos hábitos relacionados con dejar de cuidarnos la piel, no tomar las suficientes horas de sol al día y consumir platos más calientes y olvidarnos de las ensaladas, o platos más fríos… provocan un cambio muy certero en nuestro pelo y uñas. ¿Has visto nuestro post sobre la caída de pelo en otoño y como remediarla? Aun siendo un proceso natural, podemos trabajarlo para que repercuta en nosotros lo mínimo posible.
Pon fin al estrés de otoño y da la bienvenida al invierno
Lo primero que debemos tratar de estabilizar son nuestras horas de sueño. Dormir entre 7 y 8 horas nos facilitará, sin duda, el conseguir rendir en nuestro día a día tal y como esperamos y deseamos. Esto debemos de procurarlo aún no madruguemos y estemos de vacaciones.
Durante estas navidades evitar excesos alimenticios. ¿Qué tal si nos elaboramos una dieta rica en cítricos? Podemos preparar ricas cenas y comidas durante estas fiestas basadas en perejil, sésamo, frutas y verduras de temporada y cereal integral. También el arroz, algas, tofu, legumbres, pescado azul, la patata y el albaricoque, nos ayudará a controlar nuestro estrés y como no, nuestra salud.
Aprovechar las horas de luz al máximo, y si podemos enlazarlas con hacer ejercicio, mejor. Siempre con precaución y tomando las medidas de seguridad correspondientes.
Evitar el tabaco, el alcohol… ¡Haz un esfuerzo! son los principales culpables del estrés en otoño y debemos aprender a gestionarlos de cara al nuevo año.